La Ley 44/75 preveía que la financiación del Ferrocarril Metropolitano de Bilbao se llevaría a cabo de la siguiente manera:
- Estado: 2.000.000.000,- Ptas.
- Diputación Provincial: 1.000.000.000,- Ptas.
- Ayuntamientos integrados en el C.T.B.: 1.000.000.000,- Ptas.
El resto de la financiación se realizaría por el propio Consorcio, concertando las necesarias operaciones de crédito, cuya amortización se realizará con cargo a la explotación.
En 1980 y a raíz del traspaso de transferencias, el Gobierno Vasco pasa a ocupar el lugar que ostentaba el Gobierno central, estando compuesta la financiación:
- 50% Gobierno Vasco
- 25% Diputación Foral de Bizkaia
- 25% Ayuntamientos consorciados.
En 1986, se elaboró un Plan de Inversiones para el tramo Plentzia-Casco Viejo. Dado que se debían acometer fuertes inversiones la Diputación Foral de Bizkaia se subrogó en las obligaciones de los ayuntamientos, quedando la financiación establecida:
- 50% Gobierno Vasco
- 50% Diputación Foral de Bizkaia
Posteriormente, esta subrogación en las obligaciones de los ayuntamientos se extendió hasta el tramo Casco Viejo-Bolueta.
Los últimos planes financieros están basados en la filosofía de financiar las inversiones íntegramente mediante endeudamiento y que las aportaciones del Gobierno Vasco y de la Diputación Foral de Bizkaia sirvan para sufragar la carga financiera y gastos de gestión a lo largo de los años.
En esta política de endeudamiento, se han realizado diferentes tipos de operaciones:
- Emisión de Metrobonos. Se cotizan en bolsa
- Préstamos del Banco Europeo de Inversiones
- Emisión de Metro obligaciones
- Créditos concertados.